He solicitado una pericial social, ¿me ayudará?

Independientemente del proceso en el que se esté involucrado, la pericial social es un medio de prueba clave y de alto valor. ¿Por qué lo afirmamos?, porque lo que nos rodea aporta mucha información, y muy valiosa, sobre nosotros.

Recordando qué es una pericial social

Una pericial social está elaborada a partir de documentos y de información recogida de forma directa de las entrevistas, que suelen ser grabadas, para no perder ninguna conversación y evitar lo máximo posible nuestro sesgo subjetivo que puede contaminar la pericial y del entorno.

Aporta una visión objetiva, neutral y profesional sobre el entorno social de una persona. Recordemos que el entorno social de cada uno de nosotros/as es  lo que nos rodea: familia, amigos, trabajo/centro educativo, dinero, salud, tiempo libre y las relaciones con los demás. Bien, cuando algo nos ocurre y necesitamos una pericial social, el/la perito social -no olvidemos que debe ser un/a trabajador/a social- investiga, analiza, estudia, argumenta, valora y dictamina todo lo que nos rodea. ¿Para qué?, muy sencillo para ver el daño que nos ha producido la situación por la que estamos pasando.

Todo lo que nos pasa tiene una repercusión, grave o menos grave, en nosotros.

Casos en los que se debe, altamente recomendable, pedir una pericial social

Hay distintos casos por los que se puede, y debe, pedir una pericial social:

• custodia de menores
• accidentes de tráfico
• acoso laboral
• acoso escolar
• homicidios y asesinatos
• negligencias médicas
• casos de violencia (familiar, de género, sexual,…)
• denuncias falsas
• …todo caso en el que haya un daño.

Cada uno de estos casos lo iremos viendo en las siguientes entradas del blog.

¿Me ayudará?

Ahora que hemos recordado qué es una pericial social, quién la realiza y en qué casos es más que aconsejable solicitarla, contestemos a la pregunta inicial, ¿me va a ayudar una pericial social? 

La respuesta es que te ayudará, no sabemos cuánto. Dependerá, y mucho, del enfoque del/la perito. 

Podemos tener una pericial muy bien fundamentada pero si el/la perito no es capaz de transmitir los resultados de la  investigación, de manera escrita y oral, en la ratificación, esa pericial sirve de poco o, lamentablemente, de nada. Esto puede ocurrir por diferentes causas, tales como: la poca experiencia del/la perito o la baja consideración, o interés, en la investigación llevada a cabo por el/la perito. Esto no pasa solo en las periciales sociales, en las de otras disciplinas también ocurre.

El objetivo principal de una pericial social es ser utilizada como prueba, dando respuesta a la  valoración del daño moral y social que hemos, o estamos sufriendo y como tal, ayudar a tener una responsabilidad civil más elevada. ¿Cómo?, pues demostrando que la persona, en cualquiera de los que hemos mencionado anteriormente, por ejemplo, ha sufrido  pérdida en su calidad de vida y un daño social, en muchos de los casos irreversible, que le va acompañar el resto de su vida.

El daño social sólo se determina a través del estudio e interpretación de lo que nos rodea. 

Por ello, podemos afirmar que una pericial social ayuda en el proceso y puede llegar a aumentar la responsabilidad civil.

Lo que nos rodea no se tiene en cuenta y, en realidad, nuestro entorno es quien tiene la información y las respuestas a las preguntas.

¿Quién puede solicitarlas?

Si eres abogado/a y tienes dudas sobre las periciales sociales o si tienen cabida en tus casos, podemos hablar.

Si no eres abogado y crees que una pericial social puede ayudarte en tu proceso, podemos hablar.

Si tienes dudas o quieres conocer más, también podemos hablar.

Porque damos voz a las historias que necesitan ser escuchadas: periciales sociales con mirada humana que abren el camino a decisiones más justas.

«Contamos lo invisible para que importe lo esencial»

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